Las primavera ha llegado y con ella una explosión de color ha invadido el huertico. Las flores atraen insectos que se alimentan del néctar que contienen. El polen se pega a sus patitas y, al ir de flor en flor, los insectos facilitan la polinización de las plantas y con ello su reproducción.
En el huertico hemos plantado algunas plantas con flores vistosas, como los claveles y las rosas, para atraer a cierto tipo de insectos. Otras plantas han crecido espontáneamente como las malvas, las manzanillas, las borrajas o las amapolas.
Lo que no todo el mundo sabe es que muchas de esas flores también tienen uso culinario, son comestibles y tienen un sabor agradable.
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Borraja |
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Borraja |
La borraja tiene unas flores azuladas y un ligero sabor a pepino. Se utiliza en ensaladas y algunos cócteles. Se consume la corola de la flor, la parte azulada, sin el cáliz, que tiene una pelusilla áspera.
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Clavel |
El clavel tiene un sabor especiado. Se consume en ensaladas de frutas o como guarnición.
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Manzanilla |
Con las flores de manzanilla se hace una de las infusiones más conocidas. Se recogen en primavera y se dejan secar pues si se hace estando frescas dan un sabor amargo.
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Malvas |
Las flores de las malvas no tienen un sabor destacado. Decoran las ensaladas pues contrastan con el verde.
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Salvia |
Las hojas de salvia se utilizan para aromatizar carnes y rellenos pero lo que no sabíamos muchos es que sus flores se emplean para elaborar conservas y mermeladas.
A los dos grupos de 1º de primaria les ha encantado ir recogiendo flores y a muchos les ha sorprendido que las flores sean comestibles.
Y tú, ¿usas flores en tus comidas?